El canto de Srila Yayavar Maharaja (Por Srila BV Bharati Goswami Maharaja)

SU KIRTAN (CANTO DE MANTRAS) PURIFICADOR
Parte de las últimas instrucciones de Śrīla Prabhupāda a sus discípulos fue predicar colectivamente el mensaje de Rūpa-Raghunātha. Manteniendo esta instrucción en mente, mi Guru Mahārāja solía decirle a sus hermanos espirituales: “De alguna manera, por el poder de la providencia, nos hemos visto forzados a quedarnos en lugares separados y crear organizaciones diferentes. Pero, con el fin de conceder el deseo de Śrīla Prabhupāda, debemos tratar de encontrarnos todos siempre que sea posible”.

De este modo, él solía invitar a todos sus hermanos espirituales cada vez que era el anfitrión de un festival o de alguna función en nuestro maṭha. Ahí, él le daba la oportunidad a sus hermanos espirituales de que hablaran sobre las glorias y enseñanzas de Śrīla Prabhupāda.

Durante uno de estos festivales, un invitado dignatario, un juez llamado Durgānātha Vasu, quien era también sabhā-pati (presidente moderador), se levantó de su asiento y le informó a Guru Mahārāja que tenía que irse por motivo de asistir a otro compromiso. Y así bien, el sabhā (hari-kathā) habría ya terminado por esa noche. Muchos invitados que eran discípulos de Śrīla Prabhupāda ya habían hablado, pero Śrīla Yāyāvara Gosvāmī Mahārāja aun no había tenido la oportunidad de hablar. Al ver que el tiempo había terminado, Guru Mahārāja le pidió a Śrīla Mahārāja que más bien hiciera kīrtana. Concediendo su petición, Śrīla Yāyāvara Gosvāmī Mahārāja se puso de pie y realizó kīrtana.

Guru Mahārāja me pidió que acompañara al juez a su auto y le diera algo de prasāda. Después que él le ofreció praṇāma (reverencias) a Ṭhākura-jī (las Deidades) y los vaiṣṇavas (Santos) presentes, caminamos juntos hacia su auto. Pero cuando estábamos yéndonos, Śrīla Yāyāvara Gosvāmī Mahārāja comenzó a cantar, nārada muni bājāya vīṇā rādhikā-rāmaṇa-nāme. Al escuchar este kīrtana, el juez quedó fascinado y volvió a su asiento.

Después que el kīrtana terminó, el juez le pidió a Guru Mahārāja: “Por favor traiga a este sannyāsī a mi casa mañana. Nunca había sentido un tipo de éxtasis como el que sentí al escuchar este kīrtana ahora. Este kīrtana fue purificador y derrite el corazón, por lo tanto, yo quiero que mi familia entera pueda sentir esto también. Mandaré un carro. Por favor vengan todos ustedes también con este Mahārāja, y hagan kīrtana mañana en mi casa”.



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Visudha Caitanya Vani
Traducción al español: Radha Kanti dasi
Edición para Radharanikijay: Hari-ras das


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